El mantenimiento predictivo son un conjunto de técnicas que se aplican con el objetivo de adelantarse o detectar posibles fallos y defectos en máquinas y componentes. Las técnicas más conocidas son las vibraciones, el análisis de lubricante (aceite o grasa), la termografía, los ultrasonidos, los impulsos de choque y el análisis de corriente.
Los análisis de estas técnicas arrojan (en la mayoría de los casos) gran cantidad de información valiosa que se recoge en un informe.
Sin embargo, gran parte de las empresas usuarias prefieren emitir un informe en el que fundamentalmente se refleje un gráfico indicando el estado de la máquina o componente analizado. Es en ese gráfico únicamente donde los usuarios finales, jefes y responsables de mantenimiento centran su atención para comprobar que “la máquina puede seguir en servicio”. Pero conocer los motivos del resultado final es fundamental para tomar decisiones adecuadas para el futuro.
Además de llevar a cabo esta “mala práctica” por parte de los responsables de mantenimiento, las empresas no cuentan, en general, con programas informáticos que traten la información de manera exhaustiva y en profundidad. En general estos programas aplican técnicas básicas de estadísticas para el analisis de los datos recogidos.
En este contexto, Lubrication Management – IK4-TEKNIKER trabaja desde hace años con un software propio, denominado Tesstek, basado en un sistema complejo de redes que ofrece una visión rápida y más profunda de los resultados a los clientes para que estos decidan si los resultados tienen impacto directo en la fiabilidad del equipo/componente o no.
