Obtención de la muestra de fluidos HTF
Para poder llevar a cabo el diagnóstico más certero, es indispensable que la obtención de la muestra de un fluido sea lo más fiable y representativa posible.
Por eso, a la hora de tomar una muestra de fluidos de transferencia de calor de alta temperatura HTF se debe prestar especial atención: principalmente se debe tener en cuenta si la muestra se toma de día o de noche y también procurar que en la muestra no se introduzca contaminación del exterior.
¿Dónde se puede tomar la muestra de fluidos HTF?
Lo recomendable es disponer de una zona específica para la toma de muestra. En esta zona se necesita un área de recogida de fluido de la purga inicial (cubeto o similar) o prever su recirculación al sistema.
Asimismo, se necesita un dispositivo tipo serpentín de acero inoxidable u otro adecuado para conseguir que la muestra se enfríe a la temperatura de seguridad (en torno a los 40º C) antes de llenar el recipiente con la muestra.
Además de las cuestiones de seguridad (salpicadura de fluido caliente, explosión), también hay que tratar de que los productos volátiles presentes en el fluido no se evaporen para no perder información valiosa.
¿Cuál es la zona más adecuada para la toma de la muestra?
La zona más adecuada para tomar la muestra es en el circuito principal del fluido, aunque se puede instalar en otros puntos considerados críticos en la planta.
También hay que evaluar dónde poner el punto de muestreo: antes de filtros, después de filtros, entre la bomba y filtro, etc. ya que la información que se obtiene varía en función su ubicación.
Kit de toma de muestra para HTF de alta temperatura
Para poder realizar los análisis de la muestra, se debe tomar en torno a 200 mililitros de fluido en el punto decidido para la toma de la muestra.
El recipiente que se debe utilizar tiene que ser químicamente estable y a prueba de roturas. Normalmente suele ser un recipiente de aluminio o vidrio topacio con tapón de seguridad.
Lubrication Management cuenta con un kit típico de muestreo en el que se incluye tanto un recipiente de aluminio como uno de vidrio topacio, así como la etiqueta de muestra y los accesorios para la toma de la misma.
Por último, se debe rellenar la hoja de datos de la muestra debidamente cumplimentada y enviarla al laboratorio para su análisis en un embalaje suficientemente robusto para que no se rompa en el transporte.